Tiempos Interesantes

"Ojalá te toque vivir tiempos interesantes". Así reza una bendición china mencionada seguido por Felipe Calderón hace ya algunos años cuando se dirigía a los panistas a quienes entonces encabezaba como Presidente nacional del partido. Tiempos interesantes son los que vivimos. Ante la derrota electoral, el PAN se apresta a entregar el poder luego de doce años en el gobierno federal. El PRI, el dinosaurio que nunca murió, en cambio, se alista para regresar con fruición que despierta en la mayoría recelo y desconfianza. La llamada izquierda duda entre volver a seguir a su líder hasta la ignominia o recoger sus ganancias, y no son pocas, para negociar con el nuevo poder.
Tiempos interesantes con un nuevo Presidente de la República débil por su intelecto gris y por la ausencia de una mayoría propia en el Congreso. Débil por su imagen de triunfador tramposo y a la antigua. Débil por la convicción generalizada de que "él es el Presidente pero el que manda vive en frente". Por la certeza de que otros mandarán: las televisoras, los poderes fácticos, el grupo Atlacomulco, los gobernadores... Otros, no él.
Tiempos interesantes en los cuales un Presidente panista encara su más grande pesadilla, entregar la banda a un priísta. Un presidente que hace años invitaba a ganar el gobierno sin perder el partido y que hoy ve cómo se pierde el gobierno quedando maltrecho el partido. Intentando además quedarse con el partido.
Tiempos interesantes para los que militamos en un partido concebido como escuela de ciudadanía y como vehículo de acceso democrático al poder para concretar un programa determinado, basado en la preeminencia del ser humano frente al Estado y al mercado. Concebido por igual con ambos propósitos pues no son excluyentes. Al contrario, esa es nuestra naturaleza y nuestro signo diferenciador: sí buscamos el poder como los otros partidos, sí queremos ganar elecciones, pero no a cualquier precio ni de cualquier manera. Y lo queremos hacer formando ciudadanos -hombres y mujeres informados, libres, conscientes, responsables de su actuar en la construcción del Bien común-.
Tiempos interesantes en Acción Nacional pues tenemos el reto de evaluar con serenidad, objetividad y buena fe nuestras acciones y decisiones, sin caer en descalificaciones simplistas, ánimos revanchistas u oportunismo mal disimulado. Porque tenemos el desafío de aceptar sinceramente nuestros errores y omisiones, corregir institucionalmente nuestros yerros, y definir un nuevo rumbo basado en nuestra identidad pero buscando responder a las inquietudes de la sociedad actual. No a complacencias pero no a canibalismos estériles.
Ni los triunfos ni las derrotas son causados por un solo factor. Con esa serenidad, objetividad y buena fe revisemos cuál fue el papel en la campaña de las dirigencias nacionales, estatales y municipales, evaluemos a la campaña en sí, su eficiencia, su eficacia, su penetración, su diseño, su mensaje; analicemos el desempeño de nuestros candidatos -todos- ¿fueron los mejores, los más aceptados, los más adecuados?, ¿qué papel jugaron los gobiernos emanados del partido en el resultado final? ¿cómo influyeron, para bien o para mal, en la calificación de los ciudadanos a nuestros candidatos y a nuestra oferta política?, etc., etc.
Tenemos la obligación de revisar nuestro desempeño integral como partido político: como fuerza electoral, como agrupación estructurada y organizada de ciudadanos con una ideología propia; nuestro desempeño como gobierno federal, como gobiernos estatales y municipal donde lo seamos, como oposición donde lo seamos, como bancadas legislativas; nuestro desempeño como canal y cauce de las inquietudes ciudadanas.
Con este análisis y esta revisión, más allá de debates entre los que proponen una refundación o los que promueven una reestructuración, podremos aprender de la dolorosa derrota, prepararnos para el futuro y encararlo con esperanza, movidos por el amor a México y afincados en nuestros principios humanistas. Agradecidos de vivir tiempos interesantes.
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Aprovecho para mandar un abrazo y felicitar a Rodolfo Ruiz y a todo su equipo por un aniversario más de "e-consulta", al mismo tiempo que agradezco la oportunidad de colaborar con mis opiniones.